No es hazaña
Esto no tiene nada de hazaña, pero es
una gesta
compartir mi copa de vino con una
criatura desentendida
del universo. La miro despacio, la
miro incluso
antes de ponerme de pie, la miro y en
diez segundos
ya no soy nada. Siempre me he de
sentir aplastado.
Es fortuita la forma de decir la
palabra correcta
en el caso de la asfixia,
es fortuito el imaginario adjunto que
viene con la manifestación
del viaje, pero esto no tiene nada de
hazaña,
es un solo una proeza, una triste
proeza
que no será contada nunca por ningún
poeta de los caminos.
Hace mil años que no duermo, he estado
parloteando
hasta las tantas, creyéndome un héroe
moderno que sabe
salvar almas descarriadas,
debajo de las ruedas del metro he
construido guaridas
para poder morir tranquilo,
y para vivir tengo la convicción del
trabajo que dignifica a la
concha de tu madre,
estoy así, somnoliento, sin hacer
demasiado caso,
sabiendo que esto no tiene nada de
hazaña
pero que voy juntando papeles para un
futuro currículum zarrapastroso.
Sin fe y sin reglas, como quien
llamara a la muerte a su puerta,
la vuelto a mirar a través de mi copa
de vino,
agito mi copa para verla menos, si es
posible
no verla nunca más en la historia,
porque apenas
tiene esto de historia truncada,
apenas, con sigilo, me meto el dedo a
la boca como una guagua
hambrienta, y también lloro, y me cago
encima,
complaciendo a las visitas que me
llaman feo, que me tocan
los pies, el cuello, el pene que
oscilaba entre sus manos,
como una gesta, como una proeza,
como una historia a medias,
como algunas cosas horribles que a
esta hora
significan algo menos que hazaña.
leo esto y es como un pichulazo de puro talento, directo en mi cara, y hace que me hunda en la desdicha de ser tan penca y en la felicidad de ser amiga de un weón que sabe escribir tan bien aunque no sepa consolar.
ResponderEliminarEso, quería escribir en tu blog porque hace cualquier rato que no lo hago y me siento terrible de mal no haciéndolo, deberías mostrárselo a todo el mundo (1313) y que todos te comentaran y alabaran y ser como jesús, comentado, alabado y mundialmente festejado.